Purificar y desinfectar el agua de la piscina utilizando sal es posible y los beneficios son innumerables. Con este sistema, que nos retrotrae a la época en que la sal se consideraba la más preciada de las panaceas, el grado de salinidad del agua se sitúa en un nivel decididamente bajo, lo que hace que la experiencia del baño sea confortable y saludable para la piel.

Cuando hablamos de piscinas de agua salada nos referimos a un tipo especial de desinfección del agua, una alternativa a los productos tradicionales a base de cloro para un impacto mucho más saludable y ecológico en el medio ambiente.

Una solución original e innovadora para mantener un alto nivel de calidad de forma sostenible y ecológica.

No utilizamos productos químicos para mantener limpia el agua, sino que confiamos en el poder antibacteriano de la sal.

La electrólisis salina es un sistema de desinfección eficaz y sostenible: no en vano se considera uno de los métodos más eficaces y naturales para el tratamiento del agua sin el uso directo de cloro.